Actualmente hay una necesidad imperante de eliminar lo "innecesario".
Una tarea importante en la vida es simplificar las cosas, por eso hay que saber escuchar a quienes hacen su trabajo haciendo las cosas de manera sencilla. Es una forma de hacer las tareas flexibles, con mayor capacidad para reaccionar ante las vicisitudes, enfrentar los cambios y explorar oportunidades, y así aprender a sobrevivir a las novedades o a los desafíos competitivos. Tres preguntas son clave para simplificar las tareas. 1.- Qué resultados produzco con lo que hago?. 2.- Por qué hago esa tarea?. 3.- Hay algo necesario en lo que hago? En menos de 250 palabras debo responder. Si necesito más...piénsalo, reconsidéralo, porque lo que no aporta a los resultados, sobra. Tomemos un procedimiento, descompongámoslo en el máximo número posible de pasos y detallándolos, hagamos una lista. Revisemos y analicemos para saber si son necesarios. Nos sorprenderemos de las vueltas, " ires y venires " que hemos construido para llegar a un punto, e inclusive con éstas, nos alejamos del objetivo común y final. Simplifiquemos y obtendremos múltiples beneficios. Aprendamos a diferenciar entre lo necesario y lo innecesario, entre lo práctico y lo complicado, sin afectar el resultado final. Esto aplicable a todos los ámbitos de la vida. Gana tiempo y vive feliz.
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