Se interpretaba como una serie de servicios
que se prestaba a los ciudadanos de forma gratuita y onerosa. No obstante, si
nos atenemos a su traducción greco-alejandrina (leiturghía), hacia referencia
al culto que realizaban los sacerdotes y levitas en nombre del pueblo.
El término liturgia no aparece mucho en el
Nuevo Testamento, y este poco uso parece ser que era debido a la que la
traducción cristiana del término no lo encontraba lo suficientemente
significativo para expresar toda la riqueza del culto cristiano. Con los
humanistas del occidente cristiano se empieza a utilizar este término con mucha
mayor frecuencia.
Hasta entonces se habían utilizado términos de la más diversa índole para expresar significados similares: actio, officium, sacramentum, celebratio, sacrum, etc. A partir del siglo XVIII liturgia se empieza a utilizar como sinónimo del "culto divino". La liturgia pasa a ser sinónimo de celebración religiosa.
Hasta entonces se habían utilizado términos de la más diversa índole para expresar significados similares: actio, officium, sacramentum, celebratio, sacrum, etc. A partir del siglo XVIII liturgia se empieza a utilizar como sinónimo del "culto divino". La liturgia pasa a ser sinónimo de celebración religiosa.
Estas ceremonias religiosas, y celebraciones
litúrgicas, tienen como finalidad el culto a Cristo, quien está presente y
actuante en todas estas manifestaciones. Para los creyentes es la figura más
importante de la ceremonia (al igual que para un acto civil pueda ser el Rey,
la Reina o el Presidente)
Sin
entrar en demasiadas consideraciones religiosas la estructura de la liturgia
suele tener dos partes bien diferenciadas: lecturas y homilías (liturgia de la
palabra) y ritos sacramentales (liturgia del sacramento). "
No hay comentarios:
Publicar un comentario